20 de novembre del 2006

la guerra que se acerca estallará mañana lunes por la tarde, y tú en el cine sin saber quién es el malo...

...pero qué lindo es meterse en un teatro el viernes, a llorar en la previa en el hombro de una amiga, a escuchar la poesía de esa obra. Sobre todo, irnos fascinadas con ella, la protagonista. Y quedarnos hablando dentro del auto, en el estacionamiento. Y dormir el sábado hasta las 5, más allá de la escapada a por el antojo y la miel. Y salir a caminar por el Rosedal. Y estar unas horas con internet y encontrar gente del otro lado. Y luego mandarme charla tal con J en el teléfono, contándonos todos los chismes y planeando visitar la chocolatería nueva de Belgrano. Y hacer almuerzo de mujeres el domingo. Y liquidar el día contentas, sonriéndonos mucho con ella, que está fantástica.
Y querer tener todos, todos, todos los trajes que usan de Mariano Toledo.
Qué lindo son los refugios mentales de findesemana, para que luego llegue el lunes y no sea tan terrible todo...