20 de desembre del 2005

No sé. Hoy simplemente no me puedo levantar de la cama. Llamé.
Posiblemente sea el último día que pueda faltar en mucho tiempo; en enero voy a estar sola contra el mundo.
No cené anoche; no tengo mucha hambre.
Anoche no podía salir del baño; descompuesta, me leí todas las revistas.

Soñé con una mujer que daba clases y retaba; debía ser Pina Bausch. Y cocinaba rosas, millones; seguramente para sus puestas. Y había un árbol de navidad medio pelado y yo no podía arreglarlo porque, cada vez que ponía una guirnalda, ésta se caía.

La mujer, mientras, daba clases de puesta, y llegaban de visita desde Cecilia Roth a Carolina Fal, y se quedaban a ver.
Al final, muchos se ponían a cocinar y decían ¿A qué hora empezó?... Terminó antes la clase...

Fiacor.