10 de desembre del 2005

Esto es ridículo. Ya probé de todo, con service al teléfono, y desde mi compu no puedo entrar al mail de yahoo. Fuck. Mis 2 mails son de yahoo... Voy a tener que bajar al locutorio para chequearlos: un anticipo de lo que viene en enero, gracias a que ayer di de baja internet. Money makes de world go around.

En otro orden de cosas, J. dice que siempre somos los mismos 27 los que vamos al teatro, "¿se dieron cuenta?". Nos encontramos de casualidad en mi vuelta a El niño en cuestión, y también con Luciano y la troupe Chejov, con quienes habíamos estado la semana pasada en Schiller y la anterior en Garbo.
Luego, como las cosas improvisadas, pasamos muy linda noche cenando armenio en ese centro de la comunidad en que cocinan las madres y abuelas y atienden los chicos que recaudan para su viaje de egresados a Armenia. Es todos los viernes a la noche, ahí en Palermo. Rico y barato (el plan ahorro se extiende a todos los rubros). Entonces aproveché la tirada y dije: ¿y por qué no vienen a comer el postre a casa y de paso la conocen? Y ahí J. se puso imperceptiblemente a la defensiva, y ya aquí todos fueron ataques solapados. Los mismos que hicieron que no la invitara formalmente en 4 meses, habiendo sido ella mi más cercana amiga durante muchos años.
Y se acabó la linda noche y por suerte se fueron, y cuando bajé a abrir me saludaron y luego en la puerta ellas se siguieron saludando entre sí, y nunca más se dieron vuelta y yo dije Bueno, y cerré, con la certeza de que esas chicas ya no pertenecían a ahora, sino a un momento mío del pasado, de alguien que ya no soy.

Nota mental: nunca más hablar con J. sin la presencia de mi abogado. Me da vuelta la argumentación en el aire y siempre termina atacando mis pocas convicciones, y yo -que soy tan mala defendiendo lo que intuyo sin dudas- me quedo sin recursos.

Hoy, a las 10, teléfono. Una pregunta de esas que me hacen de tanto en tanto: Kusturica, ¿es serbio, yugoslavo o qué? Ahí me di cuenta: tampoco puedo entrar a Imdb. O a los comments de ciertos blogs. Busqué una Haciendo cine y aclaré el dilema. Mi amigo y su programa de radio...

Y me fui a bañar. Y leí diarios viejos. Y ahora sólo pienso leer y dormir y escuchar Wagner y caminar.

Esta semana es más rara... porque les conté del sueño del río, y de los anónimos, y del belga, ¿no?