20 d’octubre del 2005

el padre de elvira

"...Mi padre nos educó en la idea de que todas las noticias del periódico estaban relacionadas con él. Aún a día de hoy yo funciono con esa creencia. Abro el New York Times, veo los diques de New Orleans y pienso: 'A la empresa de mi padre nunca se le cayó ningún dique'. Cuando mi padre, por ejemplo, leyó el suceso de la enferma mental que mató a cuchilladas a varias personas en el hospital donde trabajaba, decía: 'Yo tomaba café en el bar de los padres de esta chica'. Y entonces todo cobró un sentido diferente. Él siempre tiene algún lazo con el curso de la historia que le convierte en el astro rey. Cuando se investiga el 11-M recopila cantidad de coincidencias: una amiga suya llamaba desde el locutorio de los terroristas en Lavapiés, el día anterior comió cuscús en un restaurante al lado de unos individuos que llevaban mochila. Dios mío, si es que vive en el epicentro. Mi padre, por ejemplo, lee que el doctor Fuster recomienda beber vino a diario y dice: yo lo hago desde los 12 años, ¡es de cajón! Para mi padre casi todo es de cajón. Ha seguido la pista de varios asesinatos un poco al estilo de Mrs. Marple, pero no se lo dice a la policía porque él no trabaja gratis. Ha intentado averiguar qué es lo que hacen los obreros de Gallardón enfrente de su casa desde hace un año, y como no lo consigue, ha llegado a la teoría de que una vez yo escribí algo contra Gallardón y ahora él sufre las consecuencias. Mi padre cura enfermos. Ha inventado una plantilla para la gente que sufre ojo de gallo en el pie. Tú le llevas una plantilla y él te la costumiza según tu pie, y te vas de su casa como se iban los leprosos después de que los tocara el Señor. Él no pide nada, si acaso una caja de Tempranillo por Navidad. Hay gente de barrios adyacentes (Vallecas, La Estrella) que le pide consejo o le lleva niños para que los bese. Lo malo es que nosotros le hemos salido mucho más vulgares. Con lo que le gusta a mi padre estar en el meollo, por ejemplo, anda un poco decepcionadillo últimamente porque ninguno de sus hijos le hemos salido gay. A mi padre le hubiera gustado tener un Zerolo. Yo veo que esto es como una moda pasajera, que mi padre volverá a apreciarnos como personas, no por nuestra opción sexual, pero a él le duele (aunque no lo dice) que algún amigo suyo le haya tomado la delantera en esta problemática. Lleva muy mal que le roben el protagonismo. Ayer lo llamé porque leí que les han dado el Nobel a Warren y Marshall, los que descubrieron que la úlcera estaba provocada por una bacteria. Sé positivamente que mi padre lleva unos días presumiendo por el barrio de que yo fui una de las primeras que siguió el tratamiento, una pionera, que es lo que a él le gusta que seamos. Antes de colgar me dijo algo inquietante: hija mía, no hay que cantar victoria, aunque Warren y Marshall afirmen que la úlcera es una bacteria y no tiene que ver con el carácter nervioso, dentro de unos años se sabrá que esa bacteria sólo sobrevive si habita en el estómago de personas como tú. Cuando le cuelgo el teléfono me llevo la mano al estómago, segura de que la ciencia le dará la razón. No es fácil ser hija de Dios. Es como que nunca estás a la altura..."

(El país, 16/10/05)