22 d’abril del 2005

Esto de irme de vacaciones para quedarme laburando es, cuanto menos, penoso. Eso es lo malo de los 2 laburos: difícilmente se pueden hacer coincidir las vacaciones. Entonces decidís: bueno, por lo menos veo el Festival de cine como se debe...
Pero ayer me dormí con El cielo gira, hoy con Bill Plymton... y luego pensaba dormir una "siestita" de 6 a 7, y me desperté 23.48... Tal vez yo no esté captando las señales...

Pero lo bueno de estas vacaciones, sin duda fueron las comidas. Recomiendo Bengal (caro, aviso) para comer indio. Para leer a la tarde, Olinda o el BN Café te dan un toque de NY con sus bares blanquísimos. Y para almorzar, o para una tarde lluvia: Oui oui, en Palermo Hollywood (plato del día, panes riqúsimos, scons, sopas, sandwiches, rosas rojas y un jarro de limonada con menta.... Ah! y brownies de chocolate en frascos gigantes).

Y Iaies dos viernes seguidos...

Se me está acabando la plata, pero no quiero volver. Hay tanta vida acá afuera...